por Carlo Dorofatti
traducción de Adela Kaufmann
del Sitio Web HorusCentre
Este ensayo es un extracto del libro electrónico: “Viajando en el Tiempo” por Carlo Dorofatti
traducción de Adela Kaufmann
del Sitio Web HorusCentre
Este ensayo es un extracto del libro electrónico: “Viajando en el Tiempo” por Carlo Dorofatti
Fuente: bibliotecapleyades - timetravel
Desde hace muchos años, en los Centros EOGA (Orden Endotérica para la Ascensión Global) y durante muchos viajes por todo el mundo, Carlo Dorofatti (también conocido con el nombre de “Gattopardo” o “Frater Superior O:.M:.M:.”) sugiere, experimenta y utiliza nuevos conceptos de realidad, organiza y maneja equipos de investigación, cursos y conferencias.
En este ensayo sintético e introductivo sobre el concepto del Tiempo, están descritos los aspectos fundamentales de lo que quizás podría ser considerado como uno de los temas más fascinantes de la Física Esotérica, la cual es el principal aspecto de la realidad investigada por Carlo Dorofatti y sus compañeros de trabajo durante sus modernas investigaciones.
CONCEPTOS FUNDAMENTALES
La Física Esotérica (Esoteric Physics) considera el tiempo como un reino natural.
El tiempo es secuencial solamente donde existe el espacio y donde hay formas, y su interacción dinámica. En este caso específico, estamos hablando acerca de nuestro plano material tridimensional. Fuera del mundo de las formas, el “flujo” del tiempo – como una secuencia cronológica – no tiene sentido, y existe en concordancia con diferentes dinámicas y significados.
El tiempo es el primer efecto de la reunión de leyes, desde donde nace el mundo de las formas. Dentro del tiempo, cada forma – desde su primera manifestación y percepción – determina el comienzo del flujo, donde causa y efecto hacen realidad el vínculo temporal entre un acontecimiento y otro, dentro de un plano preciso de existencia.
El universo de formas está compuesto por muchos planos de existencia, eco-mundos y realidades paralelas que existen también en dimensiones ultra-luminales.
La complejidad creada por esta visión de nuestro universo conduce nuestra visión y experimentación hacia diferentes flujos de tiempo, los cuales interactúan de muchas diferentes formas. Especialmente desde el punto de vista de la alquimia, el Tiempo es un parámetro a través del cual consideramos cada forma, que es apoyada por la “partícula de tiempo” en la cual participa.
Con el nacimiento de la Física Cuántica, la física moderna comienza a comprender la infinidad de relaciones entre las formas, espacio y tiempo, en donde las causas y efectos no siguen solamente una sola dirección o una secuencia concordando con nuestro sentido común.
El tiempo es la posibilidad dada a las formas para transformarse a sí mismas a lo largo del el eje del flujo temporal, instante por instante, acontecimiento por acontecimiento, hacia la dirección del desarrollo de la complejidad.
Por ello, solo desde un punto de vista teórico, los tiempos pasados están relacionados con sistemas menos complejos, y los tiempos futuros con sistemas más complejos, donde la estructura del universo está compuesta por masas progresivamente más pequeñas, pero capaces de manifestar una funcionalidad más amplia, y apoyar un nivel más alto de información/memoria, dentro de un contexto cada vez más evolucionado.
Dije “teóricamente” porque, debido a ciertas razones (relacionadas con la expresión de la “conciencia”), es posible que el tiempo (el plano de las formas) se desarrolle a sí mismo de manera no-linear, comparado con la dirección de la complejidad. En este caso, la secuencia de acontecimientos señala una intrincada “geografía”.
Básicamente, la física esotérica considera el tiempo desde dos diferentes puntos de vista: linear y simultánea.
Nuestra percepción está bastante acostumbrada al primer punto: es cuestión de considerar el tiempo solo en su función como un flujo, desde el pasado hasta el futuro. Estamos inmersos en un río-de-tiempo, y participamos en su constante flujo. Vemos lo que convencionalmente llamamos “historia”, a través de nuestra memoria personal, colectiva y convencional, así como nuestra percepción.
Debemos entender que los acontecimientos que van cayendo en la historia (esta es la relación entre las formas) no se organizan a sí mismos sobre el eje del flujo del espacio-tiempo de una manera uniforme, sino que son más intensos, según líneas energéticas especiales, donde la complejidad incrementa la probabilidad de manifestarse y desarrollarse a sí misma (líneas de sincronicidad).
Los acontecimientos se organizan a sí mismos dentro de secuencias temporales precisas que nosotros llamamos “paquetes de tiempo”.
Los paquetes de tiempo contienen acontecimientos (formas), y cada uno de ellos tiene una especie de “validez” de complejidad. Esta no es la complejidad de los acontecimientos sostenidos por el paquete, sino la posición angular del todo respecto al cono de la complejidad. Este parámetro tiende a ser repetitivo, y sigue una especie de ritmo, de acuerdo con las características del plano de existencia.
Solamente un consejo: no espere entender todo perfectamente POR AHORA, ¿si? Refresque el libro de introducción acerca de la Física Esotérica y… siga adelante.
De un paquete temporal a otro, la complejidad sigue diferentes flujos de evolución y crea un ritmo.
Podemos pensar en cada plano de existencia como una sinfonía, una música que tiene un ritmo preciso. Los paquetes del tiempo con el mismo valor se las arreglarán a lo largo del flujo del tiempo, según este ritmo en particular.
La Física Esotérica (Esoteric Physics) considera el tiempo como un reino natural.
El tiempo es secuencial solamente donde existe el espacio y donde hay formas, y su interacción dinámica. En este caso específico, estamos hablando acerca de nuestro plano material tridimensional. Fuera del mundo de las formas, el “flujo” del tiempo – como una secuencia cronológica – no tiene sentido, y existe en concordancia con diferentes dinámicas y significados.
El tiempo es el primer efecto de la reunión de leyes, desde donde nace el mundo de las formas. Dentro del tiempo, cada forma – desde su primera manifestación y percepción – determina el comienzo del flujo, donde causa y efecto hacen realidad el vínculo temporal entre un acontecimiento y otro, dentro de un plano preciso de existencia.
El universo de formas está compuesto por muchos planos de existencia, eco-mundos y realidades paralelas que existen también en dimensiones ultra-luminales.
La complejidad creada por esta visión de nuestro universo conduce nuestra visión y experimentación hacia diferentes flujos de tiempo, los cuales interactúan de muchas diferentes formas. Especialmente desde el punto de vista de la alquimia, el Tiempo es un parámetro a través del cual consideramos cada forma, que es apoyada por la “partícula de tiempo” en la cual participa.
Con el nacimiento de la Física Cuántica, la física moderna comienza a comprender la infinidad de relaciones entre las formas, espacio y tiempo, en donde las causas y efectos no siguen solamente una sola dirección o una secuencia concordando con nuestro sentido común.
El tiempo es la posibilidad dada a las formas para transformarse a sí mismas a lo largo del el eje del flujo temporal, instante por instante, acontecimiento por acontecimiento, hacia la dirección del desarrollo de la complejidad.
Por ello, solo desde un punto de vista teórico, los tiempos pasados están relacionados con sistemas menos complejos, y los tiempos futuros con sistemas más complejos, donde la estructura del universo está compuesta por masas progresivamente más pequeñas, pero capaces de manifestar una funcionalidad más amplia, y apoyar un nivel más alto de información/memoria, dentro de un contexto cada vez más evolucionado.
Dije “teóricamente” porque, debido a ciertas razones (relacionadas con la expresión de la “conciencia”), es posible que el tiempo (el plano de las formas) se desarrolle a sí mismo de manera no-linear, comparado con la dirección de la complejidad. En este caso, la secuencia de acontecimientos señala una intrincada “geografía”.
Básicamente, la física esotérica considera el tiempo desde dos diferentes puntos de vista: linear y simultánea.
Nuestra percepción está bastante acostumbrada al primer punto: es cuestión de considerar el tiempo solo en su función como un flujo, desde el pasado hasta el futuro. Estamos inmersos en un río-de-tiempo, y participamos en su constante flujo. Vemos lo que convencionalmente llamamos “historia”, a través de nuestra memoria personal, colectiva y convencional, así como nuestra percepción.
Debemos entender que los acontecimientos que van cayendo en la historia (esta es la relación entre las formas) no se organizan a sí mismos sobre el eje del flujo del espacio-tiempo de una manera uniforme, sino que son más intensos, según líneas energéticas especiales, donde la complejidad incrementa la probabilidad de manifestarse y desarrollarse a sí misma (líneas de sincronicidad).
Los acontecimientos se organizan a sí mismos dentro de secuencias temporales precisas que nosotros llamamos “paquetes de tiempo”.
Los paquetes de tiempo contienen acontecimientos (formas), y cada uno de ellos tiene una especie de “validez” de complejidad. Esta no es la complejidad de los acontecimientos sostenidos por el paquete, sino la posición angular del todo respecto al cono de la complejidad. Este parámetro tiende a ser repetitivo, y sigue una especie de ritmo, de acuerdo con las características del plano de existencia.
Solamente un consejo: no espere entender todo perfectamente POR AHORA, ¿si? Refresque el libro de introducción acerca de la Física Esotérica y… siga adelante.
De un paquete temporal a otro, la complejidad sigue diferentes flujos de evolución y crea un ritmo.
Podemos pensar en cada plano de existencia como una sinfonía, una música que tiene un ritmo preciso. Los paquetes del tiempo con el mismo valor se las arreglarán a lo largo del flujo del tiempo, según este ritmo en particular.
Use otros sentidos, y no solo su mente racional para visualizar y entender este mecanismo.
Los paquetes de tiempo en el pasado ya están bien definidos en su nivel de saturación de acontecimientos, y su estructura es “suave” debido a la presencia de un mesurable número de acontecimientos no-saturados y de eventos de los cuales nosotros podemos definir el nivel de saturación, por lo que pueden ser re-saturados a través de acciones a un nivel más alto de complejidad.
Esto crea también la posibilidad para que la masa sea manejada durante operaciones de saltos de tiempo físico. Por esta razón, como lo vamos a explicar más adelante, viajar al remoto pasado es más fácil que viajar cerca de nuestro presente, donde la estructura de los acontecimientos no está todavía completamente definida, y por esta razón, es menos manejable (a menos que se invierta una gran cantidad de energía).
Cada paquete de tiempo dura alrededor de 66-70 años. Esta duración tiende a disminuir lentamente con el crecimiento de la complejidad.
La segunda concepción del tiempo está basada en un punto de observación fuera-de-tiempo (fuera del mundo material de formas y fuera del tiempo mismo). Desde esta posición podemos observar todo el río, desde la fuente hasta la desembocadura, e incluso todos los demás ríos posibles.
El pasado y el futuro no existen ya: solo el presente. Cada acontecimiento está presente y todos los acontecimientos son simultáneos. Están allí afuera, definiendo una especie de geografía temporal. Todo el universo, todas las posibilidades de manifestación de las formas y todos los acontecimientos están presentes en lo que llamamos “el mar del tiempo”.
En este mar, cada evento es sostenido por una fracción temporal indistinguible, y causa y efecto no tienen significado en absoluto, a menos que consideremos una secuencia determinada (mundo, plano de existencia) el cual obtiene su propia dirección en relación con la percepción y su geometría (posición en el panorama general) en relación con la dirección general de la complejidad universal.
Esta visión del tiempo nos conduce al concepto de “geografía temporal”: el universo no es un territorio espacial, sino más bien un ambiente temporal.
Dentro del eterno presente, cada objeto no es nada sino virtual e imaginable, en cualquier clase de su posible manifestación, dentro de las dimensiones materiales.
Es un mundo pre-cuántico. Este es el “mundo de las ideas”, el papel del tiempo en el cual todas las leyes que crean el universo entrelazan sus relaciones y firman aquel “acuerdo” (armisticio universal) del cual todas las posibles dimensiones, mundos y planos de existencia nacen y se manifiestan. Las “ideas” se volverán “números” y finalmente formas, desarrollándose a sí mismas a través de campos y radios de leyes, algunas, incluso, muy diferentes, pero siempre coherentes, con el acuerdo constituido (el armisticio primitivo de leyes universales).
Si usted quiere entender mejor estas dinámicas de creación, entonces por favor lea el libro electrónico que se refiere a las Físicas Esotéricas (Esoteric Physics). Cada posible mundo es simultáneo y coexiste con todos los otros, pero se distingue a sí mismo por su particular campo de sub-leyes locales.
Continuamente “presente” está el punto de encuentro de las leyes universales en esa versión particular, la cual es adecuada para el mundo preciso que estamos considerando.
Por favor, siempre recuerde que cada aspecto de la realidad está definido y literalmente “toma forma” de acuerdo con la naturaleza del observador (por supuesto que hay muchos niveles de observadores que se sintonizan a sí mismos a un nivel diferente de la realidad.)
De hecho, el punto central de la investigación científica es el investigador mismo. El ser humano es el centro, el espejo, el reflejo y la única medida posible de su realidad. Este es el punto de comienzo: la objetividad no existe y la moderna física cuántica puede diariamente verificar y confirmar esto.
El ser humano es un instrumento único de percepción existente: todos los otros instrumentos nos proporcionan información, la cual es siempre procesada, interpretada y evaluada por el ser humano quien, a su vez, les da un significado más o menos complejo y completo.
Nuestra percepción mantiene los acontecimientos y formas dentro de la existencia y extrae de ellos un valor espiritual holístico. Este valor agregado apoya – más o menos – nuestra realidad como una posible expresión del Ser Absoluto.
El viaje en el tiempo consiste en la posibilidad de moverse a lo largo de la “historia”, respetando leyes precisas con relación a la dinámica de la complejidad, y saltando en contra del tiempo, dentro de los ritmos de las posibles secuencias temporales, y deslizándose más allá de las alas teatrales de la realidad, para poder modificar acontecimientos y efectos.
Básicamente, desde un punto de vista teórico, nosotros podemos considerar tres principales maneras de hacer esto: a través de la reencarnación (cada uno de nosotros lo hace de una manera más o menos consciente), por posesión sutil o a través del desplazamiento físico.
Es una cuestión de “salir” del tiempo y localizarse uno de nuevo dentro de el, siguiendo trayectorias precisas y geometrías multi-dimensionales. Esto es posible usando el poder vinculado con su propio nivel de conciencia o mediante la “mágica” tecnología adecuada (siempre en el contexto apropiado).
Por ejemplo, la operación de “posesión” es la posibilidad de viajar a través del tiempo con sus cuerpos sutiles, para poseer a otro cuerpo (animal o humano) en el lugar de destino. En este caso, no es su parte física la que se desplaza, sino su parte sutil: el “quantum de complejidad” (nudo de complejidad), el cual está en proporción con su forma e individualidad en su vida actual.
Puesto que su parte sutil no puede desunirse de su cuerpo físico (usted todavía está encarnado y vivo), debe mantenerse siempre un canal abierto entre los dos lugares (su punto de partida y su destino). Esta operación requiere mucha energía y pudiera tener un límite de distancia. De todos modos, la ventaja para el “tiemponauta” es ser capaz de “usar” un cuerpo que ya esté adaptado al ambiente o, en caso de posesión de animales, de patrullar el hábitat con sentidos más poderosos.´
El viaje físico es la transferencia de la información (código) de la estructura física, energética y espiritual del tiemponauta.
Según este código de complejidad (y ajustando los niveles de gravedad del cuerpo respecto al contexto temporal en el que el – o ella – serán ubicados), puede hacerse el re-ensamblamiento físico en el tiempo de destino.
Vamos a profundizar este mecanismo.
Desde el punto de vista de la Magia, el tiempo no existe: son Formas que están continuamente cambiando (como eventos de pulsaciones de energía). Yo ya dije que la física esotérica considera el tiempo desde por lo menos dos principales puntos de vista: como una secuencia de acontecimientos (vinculados a la la ley de causa-efecto) y como un “territorio” donde todos los acontecimientos están presentes e independientes.
En el primer caso, la idea del pasado y del futuro colocados en en un plano mono-direccional de existencia prevalece, pero en el segundo caso hay solamente un eterno presente, en el cual pueden escurrirse infinitas secuencias posibles.
Partiendo desde ambos conceptos, podemos elaborar complejas teorías (y experimentaciones) acerca de viajes en el tiempo y espacio. Es importante recordar que el tiempo, como por el primer concepto, no es más que una lectura” sensorial” de la transformación de las formas: causa y efecto son solamente una justificación (una convención) relacionada con nuestra restringida y relativa percepción de la realidad.
El Tiempo y el Espacio no pueden ser tomados como puntos pasivos de referencia, que son fijos e inmutables, sino que, según las físicas modernas, y con todas las enseñanzas esotéricas tradicionales, también tienen que ser considerados como parte integrante de una realidad dinámica y activa. Ellos son los protagonistas, y parte de una multiplicidad integrada, y son sujetos activos del cambio y evolución.
La idea de un eterno presente nos conduce a una perspectiva que está fuera del flujo temporal, y que nos ofrece una inmediata, simultánea y total percepción de la “esfera”, conteniendo, – a diferentes profundidades, – todos los acontecimientos posibles en todos los tiempos posibles.
Este es el gran depósito llamado “el Mundo de las Ideas”, que potencialmente y virtualmente contiene todas las posibles manifestaciones de formas dentro de los límites del primitivo “armisticio” de Leyes (singularidad universal).
Los paquetes de tiempo en el pasado ya están bien definidos en su nivel de saturación de acontecimientos, y su estructura es “suave” debido a la presencia de un mesurable número de acontecimientos no-saturados y de eventos de los cuales nosotros podemos definir el nivel de saturación, por lo que pueden ser re-saturados a través de acciones a un nivel más alto de complejidad.
Esto crea también la posibilidad para que la masa sea manejada durante operaciones de saltos de tiempo físico. Por esta razón, como lo vamos a explicar más adelante, viajar al remoto pasado es más fácil que viajar cerca de nuestro presente, donde la estructura de los acontecimientos no está todavía completamente definida, y por esta razón, es menos manejable (a menos que se invierta una gran cantidad de energía).
Cada paquete de tiempo dura alrededor de 66-70 años. Esta duración tiende a disminuir lentamente con el crecimiento de la complejidad.
La segunda concepción del tiempo está basada en un punto de observación fuera-de-tiempo (fuera del mundo material de formas y fuera del tiempo mismo). Desde esta posición podemos observar todo el río, desde la fuente hasta la desembocadura, e incluso todos los demás ríos posibles.
El pasado y el futuro no existen ya: solo el presente. Cada acontecimiento está presente y todos los acontecimientos son simultáneos. Están allí afuera, definiendo una especie de geografía temporal. Todo el universo, todas las posibilidades de manifestación de las formas y todos los acontecimientos están presentes en lo que llamamos “el mar del tiempo”.
En este mar, cada evento es sostenido por una fracción temporal indistinguible, y causa y efecto no tienen significado en absoluto, a menos que consideremos una secuencia determinada (mundo, plano de existencia) el cual obtiene su propia dirección en relación con la percepción y su geometría (posición en el panorama general) en relación con la dirección general de la complejidad universal.
Esta visión del tiempo nos conduce al concepto de “geografía temporal”: el universo no es un territorio espacial, sino más bien un ambiente temporal.
Dentro del eterno presente, cada objeto no es nada sino virtual e imaginable, en cualquier clase de su posible manifestación, dentro de las dimensiones materiales.
Es un mundo pre-cuántico. Este es el “mundo de las ideas”, el papel del tiempo en el cual todas las leyes que crean el universo entrelazan sus relaciones y firman aquel “acuerdo” (armisticio universal) del cual todas las posibles dimensiones, mundos y planos de existencia nacen y se manifiestan. Las “ideas” se volverán “números” y finalmente formas, desarrollándose a sí mismas a través de campos y radios de leyes, algunas, incluso, muy diferentes, pero siempre coherentes, con el acuerdo constituido (el armisticio primitivo de leyes universales).
Si usted quiere entender mejor estas dinámicas de creación, entonces por favor lea el libro electrónico que se refiere a las Físicas Esotéricas (Esoteric Physics). Cada posible mundo es simultáneo y coexiste con todos los otros, pero se distingue a sí mismo por su particular campo de sub-leyes locales.
Continuamente “presente” está el punto de encuentro de las leyes universales en esa versión particular, la cual es adecuada para el mundo preciso que estamos considerando.
Por favor, siempre recuerde que cada aspecto de la realidad está definido y literalmente “toma forma” de acuerdo con la naturaleza del observador (por supuesto que hay muchos niveles de observadores que se sintonizan a sí mismos a un nivel diferente de la realidad.)
De hecho, el punto central de la investigación científica es el investigador mismo. El ser humano es el centro, el espejo, el reflejo y la única medida posible de su realidad. Este es el punto de comienzo: la objetividad no existe y la moderna física cuántica puede diariamente verificar y confirmar esto.
El ser humano es un instrumento único de percepción existente: todos los otros instrumentos nos proporcionan información, la cual es siempre procesada, interpretada y evaluada por el ser humano quien, a su vez, les da un significado más o menos complejo y completo.
Nuestra percepción mantiene los acontecimientos y formas dentro de la existencia y extrae de ellos un valor espiritual holístico. Este valor agregado apoya – más o menos – nuestra realidad como una posible expresión del Ser Absoluto.
El viaje en el tiempo consiste en la posibilidad de moverse a lo largo de la “historia”, respetando leyes precisas con relación a la dinámica de la complejidad, y saltando en contra del tiempo, dentro de los ritmos de las posibles secuencias temporales, y deslizándose más allá de las alas teatrales de la realidad, para poder modificar acontecimientos y efectos.
Básicamente, desde un punto de vista teórico, nosotros podemos considerar tres principales maneras de hacer esto: a través de la reencarnación (cada uno de nosotros lo hace de una manera más o menos consciente), por posesión sutil o a través del desplazamiento físico.
Es una cuestión de “salir” del tiempo y localizarse uno de nuevo dentro de el, siguiendo trayectorias precisas y geometrías multi-dimensionales. Esto es posible usando el poder vinculado con su propio nivel de conciencia o mediante la “mágica” tecnología adecuada (siempre en el contexto apropiado).
Por ejemplo, la operación de “posesión” es la posibilidad de viajar a través del tiempo con sus cuerpos sutiles, para poseer a otro cuerpo (animal o humano) en el lugar de destino. En este caso, no es su parte física la que se desplaza, sino su parte sutil: el “quantum de complejidad” (nudo de complejidad), el cual está en proporción con su forma e individualidad en su vida actual.
Puesto que su parte sutil no puede desunirse de su cuerpo físico (usted todavía está encarnado y vivo), debe mantenerse siempre un canal abierto entre los dos lugares (su punto de partida y su destino). Esta operación requiere mucha energía y pudiera tener un límite de distancia. De todos modos, la ventaja para el “tiemponauta” es ser capaz de “usar” un cuerpo que ya esté adaptado al ambiente o, en caso de posesión de animales, de patrullar el hábitat con sentidos más poderosos.´
El viaje físico es la transferencia de la información (código) de la estructura física, energética y espiritual del tiemponauta.
Según este código de complejidad (y ajustando los niveles de gravedad del cuerpo respecto al contexto temporal en el que el – o ella – serán ubicados), puede hacerse el re-ensamblamiento físico en el tiempo de destino.
Vamos a profundizar este mecanismo.
Desde el punto de vista de la Magia, el tiempo no existe: son Formas que están continuamente cambiando (como eventos de pulsaciones de energía). Yo ya dije que la física esotérica considera el tiempo desde por lo menos dos principales puntos de vista: como una secuencia de acontecimientos (vinculados a la la ley de causa-efecto) y como un “territorio” donde todos los acontecimientos están presentes e independientes.
En el primer caso, la idea del pasado y del futuro colocados en en un plano mono-direccional de existencia prevalece, pero en el segundo caso hay solamente un eterno presente, en el cual pueden escurrirse infinitas secuencias posibles.
Partiendo desde ambos conceptos, podemos elaborar complejas teorías (y experimentaciones) acerca de viajes en el tiempo y espacio. Es importante recordar que el tiempo, como por el primer concepto, no es más que una lectura” sensorial” de la transformación de las formas: causa y efecto son solamente una justificación (una convención) relacionada con nuestra restringida y relativa percepción de la realidad.
El Tiempo y el Espacio no pueden ser tomados como puntos pasivos de referencia, que son fijos e inmutables, sino que, según las físicas modernas, y con todas las enseñanzas esotéricas tradicionales, también tienen que ser considerados como parte integrante de una realidad dinámica y activa. Ellos son los protagonistas, y parte de una multiplicidad integrada, y son sujetos activos del cambio y evolución.
La idea de un eterno presente nos conduce a una perspectiva que está fuera del flujo temporal, y que nos ofrece una inmediata, simultánea y total percepción de la “esfera”, conteniendo, – a diferentes profundidades, – todos los acontecimientos posibles en todos los tiempos posibles.
Este es el gran depósito llamado “el Mundo de las Ideas”, que potencialmente y virtualmente contiene todas las posibles manifestaciones de formas dentro de los límites del primitivo “armisticio” de Leyes (singularidad universal).
World of Ideas = Mundo de las Ideas
Eternal Present = Eterno Presente
Past = Pasado
Present = Presente
Future = Futuro
Eternal Present = Eterno Presente
Past = Pasado
Present = Presente
Future = Futuro
El UNIVERSO UN CAMPO DE LEYES
La Física Esotérica dice que el Universo de Formas es una singularidad, una onda anómala que causa el encuentro de funciones precisas del ser (leyes). Esas Leyes encuentran una “relación” balanceada, creando un campo de fuerza: nuestro Universo, el Concepto prístino desde donde son generadas todas las Dimensiones y el Tiempo. Mantenga en mente que estoy usando el tiempo presente.
También podemos imaginar que la Mente Divina crea las Ideas que luego se convierten en números, y finalmente en Acontecimientos/Formas, en diferentes posibles espacio-tiempos.
Las formas se manifiestan como estructuras perceptibles (tiempo, espacio, masa, energía) y crean una posible dimensión (mundo): esta es una dirección temporal.
Recuerde que todos los “mundos paralelos” de nuestro Universo están distribuidos en diferentes frecuencias simultáneas y dimensiones. En cada dimensión de formas hay leyes locales particulares, que se derivan del acuerdo prístino universal, pero funcionan según diferentes “proporciones locales”.
Es importante mantener en mente que los mundos paralelos son todos esos planos de existencia que co-existen espacial y temporalmente con el nuestro. De hecho, las mismas estructuras del Universo son una compenetración de mundos con diferentes ritmos y equilibrios.
Su diferente “frecuencia” los mantiene como separados y representa la matriz de la estructura de sus formas. Desde el punto de vista esotérico, usando el conocimiento apropiado, energía y poder, es posible poner en relación diferentes mundos. Es más, en circunstancias particulares es posible abrir “puertas” y, en el tiempo preciso, ir a través de ellas para alcanzar diferentes dimensiones de la realidad.
La dirección temporal es el convenio a través del cual es posible medir el cambio y la evolución causadas por la interacción entre múltiples y diferentes formas temporales. El vínculo de causa y efecto es solamente una necesidad interpretativa, la cual es creada por la percepción y el significado que le damos a la realidad.
Arrow of Complexity = Flecha de Complejidad
World = Mundo
La “memoria” crea la convención causal de la realidad pasada.
La dirección temporal está vinculada a la “densidad temporal” y a proporciones gravitacionales.
Básicamente, el “Universo de Formas” asume tres características fundamentales, que son la estructura de apoyo de todos y cada uno de los mundos manifestados: multiplicidad, diversidad y dinamismo.
Las formas pueden expresarse a sí mismas a través de varias estructuras de leyes diversificadas (generando diferentes dimensiones y mundos paralelos) hacia una dirección común: la flecha de la complejidad.
Real = Real
Threshold = Umbral
Forms = Formas
Worlds = Mundos
El objetivo de las formas es crear “valor agregado”: el resultado global debe representar un “todo”, que es superior a la suma de las partes.
Este resultado es creado por la creciente “complejidad” del sistema que agrega valor al sistema mismo, el cual, idealmente, debería ser racionalizado y optimizado sin agregar masa, pero por medio de incrementar la intensidad de la relación/información/significado. La “dirección de complejidad” conduce a todo el sistema a un “punto omega” más allá del cual es proyectado fuera del mismo Universo. Esto ocurre continuamente, a través de flujos de complejidad exhalados del Universo y de todos sus posibles planos de existencia.
Cada mundo de formas tiene tres parámetros principales “locales” que lo constituyen: dirección temporal, densidad perceptible y nivel/número de dimensiones.
Dentro de cada mundo, las matrices de la realidad funcionan de una manera específica y exclusiva. El código de función de las leyes – dentro de una dirección temporal específica (mundo) – se da por lo que nosotros hemos llamado “matrices temporales”. Podemos decir que toda la Magia – desde su punto de vista más técnico – es cuestión de saber y usar estas matrices. Esta es la parte superior de todas las ciencias posibles.
Direcciones y velocidades de mundos son diferentes y, en cada mundo, la complejidad asume una expresión específica y resultado.
Los mundos trabajan juntos para alcanzar ese resultado global de complejidad, el cual apoyará la existencia de todo el Universo. El valor agregado es un resultado holístico en el cual podríamos encontrar los significados pasados que se ensamblarán con una Conciencia superior.
Parallel Worlds = Mundos Paralelos
Arrow of Complexity = Flecha de Complejidad
Durante el camino evolutivo de cada mundo, las formas se organizan idealmente siguiendo lo que llamamos “la ley de cuartos” (forma, vida, pensamiento, divinidad) y tienden a lograr el mínimo resultado de complejidad necesario (percepción, significados. Valor agregado) para apoyar su propia existencia, involucrando menos y menos materia (masa/energía) y creando más y más fluidamente niveles de relaciones.
Por lo tanto, para representar la dirección evolutiva del Universo, la física esotérica describe su desarrollo ideal como dividido por cuatro momentos cruciales:
1.- La expresión de la materia en su estado mineral
2-. el nacimiento de la vida (este es un concepto mucho más amplio de lo que considera la biología terrestre)
3.- el nacimiento y la evolución del pensamiento (filosofía, cultura, arte…)
4.- y el proceso para el cual las formas de pensamiento más simples dan lugar al concepto de lo “divino”.
MASS= Masa
Complexity = Complejidad
Progresivamente, vemos un proceso estructuración del universo material cada vez más funcional: la masa se organiza cada vez más, y las relaciones entre las formas, se optimizan cada vez más – gradualmente comprenden las funciones superiores y sus significados.
La complejidad lograda en cada “cuarto” es agregada a la complejidad estabilizada en el cuarto anterior. La compleja interacción entre las formas crea un valor agregado, para involucrar al universo en un proceso anti-entrópico y holístico que llamamos “flecha de complejidad”.
La expresión más alta del último estado evolutivo corresponde al máximo nivel de complejidad, que puede mantenerse en existencia sin ninguna ayuda de las formas (materia, masa/energía): el significado entero del universo supera al universo mismo y se proyecta a sí mismo más allá de los límites de la materialidad.
Como seres humanos, en este planeta, somos una expresión transitoria de la vida entre el tercer y el cuarto trimestre. Potencialmente somos “formas-de-puente”.
Debido al papel que las formas-de-puente tienen con el poder de su libre voluntad, desde cierto punto en adelante, no podemos dar por sentada ninguna correspondencia automática entre el flujo del tiempo y el crecimiento de la complejidad.
Por lo tanto, vemos el desarrollo de una compleja geografía sacada por todas la líneas del tiempo que se mueven en función del “cono” de la complejidad, donde el “futuro” no está siempre orientado hacia una posición de complejidad más alta.
Los mundos de formas se llaman “paralelos” porque están estructurados según diversas proporciones o cocientes de leyes, y vibran en diversas frecuencias.
Si nos imaginamos nuestro Universo como un todo o un entero integrado de mundos, entonces podemos ver que todos esos mundos son simultáneos, compartiendo el mismo “espacio” y distribuidos en diversas dimensiones.
Independientemente de la secuencia temporal convencional interior, la dirección de complejidad es la única orientación común, verdadera e ideal, hacia la cual tienden a ir todos los mundos – cada uno siguiendo su propio camino, y de la cual depende la existencia del sistema entero.
Cada mundo tiene su propio “umbral relativo” el cual realmente está combinado con todos los otros umbrales en un ambiente común, donde todas las direcciones temporales se nulifican a sí mismas.
El umbral también hace juego con el tradicional concepto del “inframundo”.
Por lo tanto, vemos el desarrollo de una compleja geografía sacada por todas la líneas del tiempo que se mueven en función del “cono” de la complejidad, donde el “futuro” no está siempre orientado hacia una posición de complejidad más alta.
Los mundos de formas se llaman “paralelos” porque están estructurados según diversas proporciones o cocientes de leyes, y vibran en diversas frecuencias.
Si nos imaginamos nuestro Universo como un todo o un entero integrado de mundos, entonces podemos ver que todos esos mundos son simultáneos, compartiendo el mismo “espacio” y distribuidos en diversas dimensiones.
Independientemente de la secuencia temporal convencional interior, la dirección de complejidad es la única orientación común, verdadera e ideal, hacia la cual tienden a ir todos los mundos – cada uno siguiendo su propio camino, y de la cual depende la existencia del sistema entero.
Cada mundo tiene su propio “umbral relativo” el cual realmente está combinado con todos los otros umbrales en un ambiente común, donde todas las direcciones temporales se nulifican a sí mismas.
El umbral también hace juego con el tradicional concepto del “inframundo”.
El Universo de Formas no está en contacto directo con “el Verdadero”, el cual lo contiene. Está envuelto por una especie de “aura” que nosotros llamamos “Umbral”.
El Umbral es un estado de ser que no necesita formas para apoyarse. Recoge los resultados de la complejidad que todavía no están completos (por lo cual no pueden combinarse con lo Verdadero y deben ser proyectados de nuevo en el proceso de las formas – en nuestro nivel humano; nosotros llamamos este mecanismo “reencarnación”).
En el umbral podemos localizar el “centro de masa” de la parte principal de las entidades y de las fuerzas divinas que componen nuestro ecosistema espiritual. Están más o menos cerca de la Forma (desde donde obtienen su alimento energético) o de lo Verdadero, según su nivel de complejidad y del sentido espiritual y de conciencia.
El Umbral se rige por leyes prístinas, pero en ciertos casos, casi es posible crear campos particulares de leyes derivadas (por ejemplo, la “Ciudadela Iniciática”, que es la dimensión iniciática post-mortem).
A través del Umbral, es posible ponerse en contacto y acceder todos los otros mundos posibles (relacionados con nuestro universo).
El Umbral es contactable usando el Sentido del Sueño, a través de muchas diversas técnicas fuera-del-cuerpo (proyección astral, viaje chamánico, o métodos más complejos con respecto a la supuesta demonizada “visita al Aethyrs”, la cual está relacionada con avanzadas enseñanzas Enoquianas y Telémicas).
El Umbral es un estado de ser que no necesita formas para apoyarse. Recoge los resultados de la complejidad que todavía no están completos (por lo cual no pueden combinarse con lo Verdadero y deben ser proyectados de nuevo en el proceso de las formas – en nuestro nivel humano; nosotros llamamos este mecanismo “reencarnación”).
En el umbral podemos localizar el “centro de masa” de la parte principal de las entidades y de las fuerzas divinas que componen nuestro ecosistema espiritual. Están más o menos cerca de la Forma (desde donde obtienen su alimento energético) o de lo Verdadero, según su nivel de complejidad y del sentido espiritual y de conciencia.
El Umbral se rige por leyes prístinas, pero en ciertos casos, casi es posible crear campos particulares de leyes derivadas (por ejemplo, la “Ciudadela Iniciática”, que es la dimensión iniciática post-mortem).
A través del Umbral, es posible ponerse en contacto y acceder todos los otros mundos posibles (relacionados con nuestro universo).
El Umbral es contactable usando el Sentido del Sueño, a través de muchas diversas técnicas fuera-del-cuerpo (proyección astral, viaje chamánico, o métodos más complejos con respecto a la supuesta demonizada “visita al Aethyrs”, la cual está relacionada con avanzadas enseñanzas Enoquianas y Telémicas).
Puesto que es un estado de Ser que está relacionado con todos los mundos, fundados por leyes prístinas, el umbral es una especie de “lugar- de-no-lugar”, donde podemos encontrar todos los cursos y las puertas para movernos de un mundo a otro, pero también, – al mismo tiempo, – a través de nuestras dimensiones psíquicas interiores y estados de conciencia.
El viaje a un diferente mundo paralelo (de forma que no solo a través de diferentes mundos-eco de nuestro plano) es posible solamente por medio de la desestructurización de nuestro propio código de leyes, derritiéndonos con las leyes prístinas y estructurándonos de nuevo según las leyes del mundo que alcanzamos. Esto involucra un cambio en la dirección temporal, densidad y dimensiones, así como también de nuestros paradigmas sensoriales.
Cada mundo está compuesto por muchos diversos planos posibles de existencia. Estos planos de existencia se reducen – por la percepción de las varias especies – a una referencia principal de la realidad. Es una convención basada en el ejercicio de los sentidos, del pensamiento y de la memoria.
Nosotros llamamos “mundos eco” a todas aquellas realidades que no han sido condensadas en el plano principal. Estas realidades están justificadas o quitadas de nuestra realidad por nuestra mente y, para nosotros, no existen en absoluto.
De hecho, cada vez que hacemos una elección, más o menos a sabiendas, esos efectos, que habrían sido la consecuencia de las opciones alternativas descartadas, flanquean un mundo temporal paralelo (mundo eco), que pronto será absorbido por la realidad principal elaborada por nuestros procesos mentales y sensoriales.
Esto significa que los mundos eco están siendo generados continuamente. Según nuestra naturaleza actual, no somos realmente “estables” y cada uno de nosotros fluctúa en diferentes eco-planos, que, no obstante, son traídos de regreso al principal, por el mecanismo de nuestra memoria. De hecho, nuestra mente (percepción-interpretación-memoria) construye continuamente el plano más significativo, o por lo menos, contenible –en el que convergen todos los demás.
La realidad es mucho más compleja y más amplia de lo que nuestros sentidos nos hacen creer.
Nuestro plano de existencia es solo nuestra realidad tridimensional, que es el resultado de la reunión entre nuestro mundo y los sentidos que aplicamos a él, los cuales han estado desarrollándose por medio de adaptación y procesos culturales.
Realmente, la realidad a la cual podríamos tener acceso – debido a nuestra naturaleza verdadera – debería ser bastante amplia, pero por el momento, en este planeta, nuestra especie ha sido afectada por pesadas restricciones sensoriales y ha perdido muchos “arquetipos” (matrices existenciales y cognoscitivas), encontrándose como “lobotomizadas” y en una condición de peligrosa carencia de conciencia (valor agregado), lo cual afecta la densidad de nuestra realidad misma.
Aparentemente ya no somos capaces de intervenir en el campo quántico de las realidades potenciales.
Existen diversos niveles de la verdad: en general, podemos decir que todo depende en lo que pensamos que es real. Vivimos en un mundo donde todo lo que vemos es solamente la punta de un iceberg de “mecánica quántica”. Las cosas no son hechas por “cosas”, sino por ideas, conceptos e información. Determinamos la realidad en la cual estamos y aquello que vemos: no hay nada “allá afuera” que no sea afectado por lo que está dentro de nosotros.
Cada “cosa” no es más que un posible movimiento de nuestra conciencia, y momento a momento, somos nosotros quienes decidimos cual movimiento llevaremos a la realidad.
Todas las realidades existen simultáneamente. Las cosas son solamente tendencias ce la conciencia.
Por lo tanto: nuestra influencia sobre la realidad es absoluta. Somos “máquinas” que producen realidades. El “iluminamiento” es la completa y verdadera comprensión, experiencia y maestría de eso.
Usted tiene que perseguir el conocimiento a través de la perspectiva correcta y enfoque correcto, sin ninguna interferencia de nuestras dependencias e ideas preconcebidas. Si usted aprende a hacer eso, entonces conocerá la realidad tal como es, y sus cuerpos tendrán una nueva experiencia en eso, con una nueva química, nuevos hologramas, nuevo lugar de pensamiento y nuevos sueños.
Es solamente en nuestra actual experiencia ilusoria de la realidad la que nos hace parecer como si nos moviéramos a través del tiempo. Esta es una ilusión, así como cuando pensamos que el espacio está vacío y que la materia es sólida. De hecho, es exactamente lo contrario.
Debido a la manera en la cual está estructurado nuestro cerebro podemos ver solamente lo que creemos que es posible. Nosotros concordamos con los esquemas que ya existen dentro de nosotros, debido al acondicionamiento que recibimos.
Nuestra conciencia influencia a otros a nuestro alrededor, las características de nuestro mundo material, así como el futuro.
Estamos continuamente co-creando nuestra realidad pasada, presente y futura.
Nuestra conciencia influencia a otros a nuestro alrededor, las características de nuestro mundo material, así como el futuro.
Estamos continuamente co-creando nuestra realidad pasada, presente y futura.
Nuestra percepción actual está basada en un tiempo mínimo, en el cual es necesario registrar la transformación del nivel de complejidad de formas. Nuestro “presente” dura aproximadamente 4 segundos. En promedio, este es el tiempo que necesitamos para poder elaborar nuestra percepción sensorial.
Por el momento, en esta época, el ser humano no es capaz de utilizar en tiempo-real la elaboración del pensamiento que se procesa en esos 4 segundos. Por lo tanto, nuestra mente tiene el tiempo para redefinir la realidad según una convención aceptable, que sea conveniente con nuestros sentidos (limitados) y con nuestro esquema mental. De esta manera, nuestra mente establece nuestro principal plano de realidad, y nuestra memoria convencional establece el plano histórico: el paradigma de causa-efecto.
Nosotros siempre percibimos cosas solamente después de que han sido reflejadas en el espejo de nuestra memoria: de hecho, el cerebro no conoce la diferencia entre lo que es visto y lo que se recuerda.
Todos estos elementos son fundamentales para comenzar realmente a entender lo que es el viaje en el tiempo.
Según las enseñanzas de física esotérica presentadas en nuestro libro de introducción (el cual yo siempre recomiendo leer antes de ir a través de las teorías de la física temporal), el “Pensamiento” no es un producto de nuestra mente, sino una sustancia en la cual todos los seres están sumergidos. Por ello, nosotros, así como todos los otros seres en diferentes niveles, no producimos ningún pensamiento, sino que solamente procesamos esta sustancia-matriz. Este valor agregado – que permite que exista nuestro universo - debería ser el resultado final del pensamiento global.
En nuestro actual estado de, nosotros no producimos pensamiento y ni siquiera no somos capaces de utilizar el resultado de nuestro proceso en tiempo-real.
En el momento en el que cada uno de nosotros presume pensar (o mejor procesar y dar una forma de frecuencia a la sustancia del pensamiento), realmente está solo recordando una dinámica que ya ha ocurrido. Esto tiene importantes implicaciones desde el punto de vista de la fisica espriritual.
Por otra parte, tenemos que considerar que el pensamiento no es uniforme en el universo (hay diferentes flujos) y la sustancia que nos alcanza ya ha sido procesada por otros niveles de complejidad, otras criaturas y fuerzas. Nosotros, a la vez, procesamos y proyectamos nuestro pensamiento procesado hacia diferentes criaturas existentes en un nivel más alto. El resultado final regresa al origen y apoya todo el sistema.
La Magia dice que los actuales seres humanos procesan y recuerdan el pensamiento, pero, idealmente, los seres humanos completos y las divinidades lo usan e incluso lo crean, y crean cosas y realidades.
Evidentemente, nuestra realidad es una ilusión, pero este es también el plano de leyes que rigen nuestra existencia, y en el cual vivimos para poder actuar, tomar decisiones, dar significados y, proporcionalmente, producir complejidad y “valor agregado”.
Cuando una especie compleja percibe formas, crea su propia convención temporal. Por ejemplo, las divinidades territoriales, en su nivel, “ratifican” la complejidad de una secuencia de realidad, definiendo lo que llamamos “paquetes temporales”, aproximadamente cada 66/70 años (momentos de “atención divina”).
El Continuo de tiempo, como secuencia, no se desarrolla a sí mismo solamente a través de acontecimientos que están vinculados entre sí por la ley de causa-efecto, sino que son las estructuras en sí, en aglomerados precisos de acontecimientos/formas los que son llamados “paquetes temporales”.
Los Paquetes temporales sostienen las formas que están organizadas en el plano temporal, siguiendo un criterio preciso. Diferentes paquetes vienen uno después del otro, espaciados por un ritmo determinado, para cada uno de ellos, en un promedio que dura unos 66/70 años. Este valor tiende a decrecer con el aumento de la complejidad.
El vínculo de causa-efecto no funciona con los acontecimientos que pertenecen a diferentes paquetes temporales, mientras los paquetes estén lo suficientemente espaciados entre sí.
Cuando un paquete termina y comienza el otro, hay un momento en particular llamado “momento de atención divina”.
Es un micro-ritmo, que es parte de aquellos ritmos más amplios, como los supuestamente denominados “Eones”, los cuales duran aproximadamente dos mil años. Las divinidades fijan la realidad, y se hacen un cuadro del estado de los acontecimientos. Este escenario histórico puede ser cambiado, no solo viajando a través del tiempo, sino que también usando un alto nivel de tecnología temporal y magia teúrgica.
Los paquetes de tiempo contienen formas de acontecimientos que han sido saturadas en el nivel preciso, según la complejidad del sistema al cual pertenecen.
Comencemos diciendo que, moverse y actuar a través del tiempo, está basado en el hecho de que hay una diferencia, un margen de complejidad, que permite a un ser más evolucionado saturar otra vez acontecimientos menos complejos, en un nivel superior de acción, poniendo en discusión la realidad histórica del plano principal.
Este “ser” (el tiemponauta) se mueve a través del fino tejido de la realidad, a fin de reajustarla y modificarla, siguiendo coherentemente caminos precisos con el ritmo de los paquetes temporales. De esta manera, él o ella pueden acceder y re-saturar los acontecimientos en contra del tiempo, gracias a su importante complejidad. La realidad alternativa se desarrolla a si misma en un mundo-eco del plano principal Este mundo eco puede, de diversas maneras, interferir con el plano principal en sí mismo, aunque esté separado de él y siga una pista diferente.
Desde el punto de vista del esoterismo, el viaje en el tiempo es una práctica que es (y ha sido) experimentada y usada por muchas diferentes Escuelas y Órdenes, usando diversos conceptos, sistemas y disciplinas.
Esta extraordinaria experiencia no es solo una cuestión de “visión” (como la clarividencia o al adivinación), sino que considera la posibilidad de moverse físicamente a través del territorio del tiempo, y actuar en los acontecimientos históricos.
Este recorrido puede hacerse siguiendo diversas maneras: reencarnación planificada, viaje sutil o chamánico, viaje astral en el tiempo y posesión de un cuerpo, así como la entrada y salida física del viaje con su propio cuerpo.
El viaje en el tiempo se puede hacer usando “puertas” naturales especiales, que permiten acceder a los túneles temporales particulares (técnicamente llamados “agujeros de gusano”) o usando una tecnología capaz de abrir o incluso crear puertas temporales y caminos adecuados.
La física esotérica estudia la teoría y la práctica del recorrido del tiempo, que, no obstante, debe ser considerado como parte de una investigación más amplia, que investiga las leyes y las dinámicas físicas y espirituales de nuestro universo.
Todos nosotros hemos estado viajando en el tiempo: estamos haciendo eso exactamente en este preciso momento, trasladándonos hacia el siguiente momento. Este es un recorrido linear hacia el futuro que experimentamos según nuestro “ritmo”.
Pero si usted quiere moverse a través del tiempo, saltando de un punto a otro, entonces solo podrá moverse hacia una complejidad inferior (puesto que “usted” ya ha estado allí) y no hacia sistemas de complejidad que son más altos que el suyo, o que el sistema de realidad de la cual usted normalmente es parte, porque esto puede ser alcanzado solamente viviendo instante por instante linear (y no saltando).
Si asumimos que el nivel inferior de la complejidad está relacionado con el tiempo pasado, lo que se ha dicho anteriormente significa que el viaje en el tiempo (que no es una carrera, sino un salto) es posible solamente hacia el pasado, que es accesible porque – en teoría – es menos complejo.
En cualquier caso, el viaje hacia el futuro no podría ser posible (desde un presente absoluto) porque no hay ningún tiempo futuro que esté ya estructurado, sino solo futuros virtuales hipotéticos de los cuales eventualmente podría ser posible solo una proyección de la mente, y no un cambio físico.
La posibilidad de causar cambios históricos puede alcanzarse:
- detonando acontecimientos claves autosuficientes
- interviniendo en los acontecimientos de compensación que tienden a desarrollarse en el plano principal, para absorber la interferencia
- importando directamente efectos del pasado hacia el presente, a través de una ramificación lateral temporal
- apoyando la realidad alternativa (en este caso, el tiemponauta sigue participando en ella - este es el caso típico del viaje por medio de la reencarnación)
Con respecto a viajes por medio de reencarnación, éstos generan un fenómeno particular llamado “separacion de planos”.
El tiempo pasado, en el plano humano de existencia en el planeta Tierra, está orientado hacia una dirección que pronto será intolerable. Esto es debido a muchos diversos niveles de causas: contaminación biológica, industrial y nuclear del ambiente, manipulaciones genéticas incontroladas y, por supuesto, la creciente degradación de los valores espirituales.
La supuestamente denominada “Nueva Era” – que potencialmente debería crear oportunidades evolutivas para la conciencia del ser humano – debe ser apoyada a través de decisiones y acciones precisas.
Pero la constricción progresiva de los sentidos y de la mente hace que estas acciones sean cada vez más difíciles y extraordinarias. No obstante, las condiciones astronómicas y energéticas en nuestro planeta se adaptan realmente o se sintonizan con nuevas posibilidades, puesto que el planeta mismo ha entrado a un nuevo estado dimensional, que mucha gente resume en el concepto de la “Edad de Acuario” (o “Eón de Horus-Maat”). Esta es una nueva secuencia de la posible realidad, que está progresivamente orientada a nuestro plano principal, y promueve potencialmente nuevos paradigmas espirituales, culturales, sociales y políticos.
El comienzo de esta fase evolutiva (de la cual el disparador sigue estando aún en proceso y se desarrolla a través de muchos pasos) debe ser situada en 1904 y, según diferentes tradiciones, podría cumplirse alrededor del 2012 (el “punto cero”) con el cierre final de un ciclo y la apertura de un nuevo curso existencial.
Recientemente, ha estado desarrollándose una “separación de planos” en esta nueva pista de la realidad humana terrestre: es causada por una interferencia exacta para re-orientar la realidad.
Esta acción es insidiosamente llevada a cabo por “fuerzas encarnadas” viniendo desde el futuro, o desde otras dimensiones, con el fin de interceptar y cambiar acontecimientos naturales, para asegurarse de que nuestro planeta Tierra – y la humanidad terrestre – sean permanentemente excluidos de cualquier avance espiritual concreto que crea potencialmente la Era de Acuario. Esto no significa que quieran la destrucción total: por el contrario, ellos trabajan para que nuestro planeta pueda ser salvado o solo porque necesitan esclavitud humana. Y esta gente a menudo se presentan a sí mismos y habla como profetas o pioneros de la misma Edad de Acuario.
Por ello, la humanidad está todavía viviendo en un plano existencial que es real y virtual al mismo tiempo.
La tarea de las varias órdenes espirituales y esotéricas, más o menos conocidas, es aquella de apoyar y proteger un plano de la realidad, de manera que el ser humano y la conciencia de la Tierra puedan seguir en el camino de la ascensión espiritual, y que nuestra realidad espiritual y material pueda aunarse a dimensiones más evolucionadas de la realidad.
EL REINO TEMPORAL
Además de los reinos naturales bien conocidos que en nuestro plano de existencia son llamados, mineral, vegetal y animal, tenemos que agregar el reino “temporal” este es un inteligente ecosistema que interactúa según leyes precisas, con los reinos del espacio mencionados arriba.
Por supuesto, así como la mayor parte de nuestra realidad, también todos los fenómenos relacionados con el tiempo y el reino temporal son restrictivamente procesados por la percepción humana y la interpretación.
No obstante, podría ser posible saber e interactuar, a sabiendas, con los reinos temporales, gracias a un nivel superior de conciencia y tecnología mágica, como, por ejemplo, el uso de “semillas temporales” con la cual sería posible orientar flujos de acontecimientos, accionar en nuevas secuencias autosuficientes, reconstruir las manifestaciones históricas actuales de la realidad e incluso dar grandes pasos hacia la creación de lo que es el sueño de todo alquimista: La Piedra Filosofal.
De esta investigación ha nacido un nuevo nivel de física pre-quántica y nos ayuda a profundizar el conocimiento de nuestro Universo.
WORLD = Mundo
Plain of Reality = Plano de Realidad
Temporal Board = Panel temporal
Space-Time Tissue = Tejido Espacio-Tiempo
En primer lugar debemos considerar que cada realidad física está hecha por un tejido de espacio-tiempo, en donde se manifiesta la realidad misma.
Es importante separar el “espacio” considerado como plano dimensional de formas y desarrollo de acontecimientos, desde el “tiempo”, que es el apoyo indispensable para la manifestación de la realidad física.
Imagine, por ejemplo, el tejido fino del espacio como una grabación, y el tejido fino del tiempo como la cinta magnética. Donde ya está grabado, podemos escuchar la historia grabada, que ha estado grabándose continuadamente en el resto de la cinta. La realidad es todo en uno, con el espacio y el tiempo, que se combinan para apoyar su manifestación.
Nuestro sentido interno de la memoria se relaciona con la percepción y la interacción con el reino temporal, y nos permite a nosotros mismos percibirnos como criaturas temporales también.
Por ejemplo, el conocimiento de nuestras vidas “pasadas” no solamente es cuestión de “buena memoria”, sino que se relaciona con el hecho de que estamos viviéndolas: deberíamos estar completamente conscientes de la simultaneidad de nuestra diversificada participación en el tiempo, en nuestras diferentes encarnaciones.
Somos criaturas temporales, impregnando el tiempo con nuestra atracción y nuestra chispa divina. Tenemos algunas raíces (nuestras encarnaciones) en diversos lugares, en los varios planos materiales posibles. Nuestro tiempo no es más que los frutos temporales de maduración de personalidades.
Cada uno de nosotros es una macro-criatura, que recoge de los mundos materiales, a través de sus raíces, la linfa vital (en términos de experiencia, complejidad y significado), la cual alimenta el inmanente y trascendente ser divino.
Soul Structure enbodied in different time and dimeensions = Estructura del alma encarnada en diferente tiempo y dimensiones
Individual a-temporal atractor = Atractor Individual a-temporal
Space/time = espacio/tiempo
Nuestro verdadero cuerpo completo se extiende en diferentes espacio-tiempos que se intersecan, y en todas las dimensiones posibles de complejidad y conciencia.
Esto es lo que cada uno de nosotros realmente es.
FÍSICA ESOTÉRICA Y VIAJE EN EL TIEMPO
¿Qué es un viaje en el tiempo?
En primer lugar debemos especificar que cuando hablamos acerca de viajes en el tiempo, no nos estamos refiriendo a una actividad de la perspectiva del tiempo, tal como una técnica de visión remota, sueño lúcido, viaje chamánico o una operación adivinatoria 1. Estamos hablando de recorridos del tiempo en el significado exacto del término, es decir, la posibilidad de moverse a lo largo del tiempo “histórico”, a fin de interactuar con objetos, gente y acontecimientos, con el objetivo de causar cambios y para apoyar secuencias de realidades alternativas o paralelas. Es una experiencia activa y física.
1 En estos casos nosotros pasivamente observamos acontecimientos pasados o futuros, a través de facultades mágicas o extra-sensoriales, sin influenciar o cambiar el curso de la historia.
Desde el punto de vista esotérico, si nosotros analizamos la historia de la Magia y sus mitos, el viaje en el tiempo no es algo nuevo. De hecho, viajar en el tiempo es considerado una facultad normal ejercitable por Magos y grandes Iniciados, en concordancia con su nivel de Conciencia.
En la física esotérica, el punto dominante es la posibilidad de realizar una tecnología acerca de esta extraordinaria experiencia, haciéndola accesible a la gente que, aun cuando están involucrados en un camino iniciático y espiritual, de otra manera no hubieran alcanzado el nivel necesario de Conciencia para emanciparse a sí mismos de los límites físicos y sensoriales del concepto convencional de la realidad.
Los significados de esta experiencia tecno-mágica van más allá del fenómeno en sí mismo, y se relacionan con muchas y muy extendidas motivaciones. El conocimiento progresivo de este panorama puede conducirnos a una extraordinaria e increíble visión de nuestra realidad y de la historia humana.
- como misiones de restauración del fino tejido espacio/tiempo para apoyar nuestra realidad
- en un “contexto de guerra” para oponerse a las fuerzas que están trabajando en contra de la evolución humana
- para apoyar realidades alternativas comparadas con los cursos históricos ya vividos
- para crear segmentos o islas de realidades paralelas a partir de las cuales se pueden importar efectos a nuestro presente
- para dar origen a secuencias históricas de las que podemos o no tener memorias
y más…
La preparación necesaria para convertirse en “tiemponauta” es muy compleja, pero, en primer lugar, esta experiencia le concierne a gente que ya ha estado involucrada en un estilo de vida iniciático exacto.
En términos generales, todos somos viajeros en el tiempo, pues vivimos instante a instante en esta realidad espacio-temporal en la cual desarrollamos nuestra historia personal.
No debemos olvidar que la reencarnación en sí es un verdadero viaje en el tiempo, un salto en la historia, de tiempo en tiempo, hacia el destino más adecuado para el crecimiento de nuestra alma.
Sin embargo, las tipologías del viaje en el tiempo de las que estamos hablando, están relacionadas con tres metodologías básicas:
- el verdadero desplazamiento físico experimentado con el cuerpo
- el viaje mediante la posesión, obtenido por técnicas particulares de viaje temporal-astral, y por poseyendo un cuerpo físico (humano o animal) que está viviendo en el destino temporal alcanzado
- y el viaje por reencarnación programada, para producir y continuamente apoyar acontecimientos complejos durante todo el lapso de vida (por ejemplo, podemos pensar acerca de la encarnación de Avatares quienes llegan a nuestro mundo en tiempos diferentes para llevar a cabo misiones específicas)
Antes de que hablemos de aspectos más técnicos, tenemos que hacer alguna consideración acerca de la estructura del tiempo y de la posibilidad de interferir con el.
La realidad del espacio-tiempo es el resultado de una elaboración consensual originada por nuestros sentidos e interpretada por nuestra mente. Todos los acontecimientos no-escogidos y las acciones no hechas generan “mundos-eco” que contienen todas las posibles secuencias no vividas (realidades alternativas).
Estos “mundos eco” son realidades potenciales que no son accesibles por nuestro nivel actual de complejidad; por lo tanto, son llevadas de regreso a un plano único y están excluidas por nuestra realidad histórica.
Mundos Eco
Cada vez que hacemos una elección, más o menos intensa, los efectos que habrían sido las consecuencias de las opciones alternativas rechazadas, corren lado a lado con la acción concreta que hemos hecho, en un “mundo eco”. Este eco (o “mundo espejo”) es muy similar a la realidad actual, sin diferencias significativas, debido a su corta longitud de tiempo. De hecho, tiende a ser reabsorbido por la realidad principal, que es formada por el actual plano de existencia.
Se trata de una realidad “fantasma”, la cual usualmente no puede producir efectos, y se descompone a sí misma en leyes.
La realidad genera continuamente mundos eco. Cada uno de nosotros, debido a nuestra complejidad potencial, flotamos a través de diversos planos posibles y virtuales, los cuales, no obstante, son llevados de nuevo hacia una única realidad consensual, por el mecanismo de nuestra percepción y memoria.
De hecho, debido a nuestra actual condición limitada, nuestra memoria determina el plano más significativo que puede ser contenido por nuestro concepto de realidad, hacia el cual convergen todos los otros planos posibles. Este plano principal es el que nosotros llamamos “historia”.
Los mundos eco son las “alas” de nuestro escenario.
Realmente, estos mundos eco son absorbidos por el plano principal solamente desde nuestro punto de vista.
Estos acontecimientos pueden:
- ser “usados” por otras formas de inteligencia
- ser reciclados
- sedimentarse en minas de tiempo
Realmente, permanecen al lado de nuestra realidad, dándole origen a secuencias virtuales: los mundos eco son insignificantes e inexistentes para nosotros, pero constituyen la compleja estructura de la realidad entera.
Cuando viajamos en el tiempo, moviéndonos, por ejemplo, desde el presente actual hacia el pasado, nos lanzamos a realidades alternativas: nos encontramos a nosotros mismos en mundos eco, aparentemente similares al plano histórico ya vivido.
Desde aquí podemos desencadenar secuencias de acontecimientos, para generar efectos capaces de interactuar con el plano principal original, y provocar cambios en el presente.
Travel= Viaje
Echo World= Mundo Eco
Main Plain= Plano principal
Según esta idea (representada arriba de una manera muy simple), sería posible consolidar una diferente convención histórica que:
- crea una secuencia paralela de acontecimientos que no interactúan con el plano histórico principal. De todos modos, también desde nuestro punto de vista, la nueva secuencia tiende a ser reabsorbida por la original, a través de acontecimientos de compensación capaces de neutralizar cualquier interferencia (principio de la resistencia temporal)
- crea acontecimientos que pueden ser convenientemente transferidos desde el mundo eco hacia el presente del plano principal, sin reestructurar las secuencias intermedias
- “si es continuamente apoyado 2, se convierte en el nuevo plano principal, reemplazando al original (ver más allá “la separación de planos”)
2 Esto es posible dando origen a secuencias generadoras de eventos autosuficientes o, en el caso del viaje a través de la reencarnación, viviendo en una fila en el nuevo plano, en proceso de formación. En todo caso, es necesario generar acontecimientos de complejidad importante, comparados con aquellos ya vividos: “gana” el plano más complejo.
No hay paradojas del tiempo puesto que las acciones hechas en el pasado generan las consecuencias que están relacionadas con realidades paralelas. Por lo tanto, el plano de la realidad de que el tiemponauta ha dejado (que es el plano principal de la realidad histórica) no está involucrado.
Las causas y efectos no son lineares, sino que están distribuidas en diferentes planos. La paradoja se debe a nuestra necesidad de conectar causas y efectos, para darle significado a la realidad, y elaborar nuestra identidad: el problema es que solamente nos recordamos de un plano a la vez.
Por lo tanto, el cambio de la historia no es, en absoluto, automático. Realmente, debe ser obtenido encontrando la manera de dirigir los efectos del mundo-eco donde el tiemponauta actúa al plano original. Por lo tanto, el tiemponauta trabaja en una realidad que no está consolidada y es diferente, en comparación con la realidad a la cual volverá.
Por otra parte, lo que nos proponemos cambiar no puede ser quitado, sino que solamente reubicado en un munco eco, porque en nuestra lógica causal representa la razón en sí misma que nos ha conducido a programar el viaje, incluso aunque no estemos completamente conscientes de ello. En este punto, es obvio que no podemos seguir usando una lógica linear.
El viajar a través del tiempo significa ser capaz de investigar los misterios de nuestra historia humana, para encontrar nuevos significados, resolver (o crear) enigmas arqueológicos, para explorar reinos no sospechados de la naturaleza, épocas desaparecidas y de civilizaciones desconocidas, para correr hacia náufragos viajeros del tiempo y para encontrar misteriosos vínculos de la aparentemente conocida historia, así como para descubrir algo más acerca del increíble cuadro cósmico del cual somos parte.
Un viaje en el tiempo requiere seguir algunas reglas.
En primer lugar debemos considerar que con la actual tecnología, solamente es posible viajar a destinos donde el nivel de complejidad de los acontecimientos y formas sea inferior, comparado con aquel del lugar de partida.
De hecho, es normal alcanzar importantes niveles de complejidad, viviendo instante por instante de manera linear (según la función de la ley derivada, “Flecha de Complejidad”, pero en el momento en que queramos “saltar” de un punto de tiempo a otro, solo podremos alcanzar estructuras con menor complejidad 3, ya que no podemos entrar donde el nivel de complejidad todavía no ha sido alcanzado por nuestra evolución natural.
3 Hacia niveles de complejidad que ya hemos cruzado durante nuestra evolución.
Según el dibujo, vemos que es posible viajar solamente hacia el pasado y no hacia el futuro (teóricamente más complejo), pero cuando hablamos acerca de viajes más extensos y navegaciones más extensas en el gran mar del tiempo, preferimos decir, por diversas razones, que nos movemos desde un presente más complejo hacia una menor complejidad, en vez de hablar acerca de viajes al pasado o al futuro, porque el tiempo no procede automáticamente en la dirección de la complejidad.
Por otra parte, es importante subrayar que cuando hay una diferencia importante de complejidad, se necesita menos energía para la transferencia: mientras más reducido es el borde, más energía es necesaria.
Para llegar a tiempos menos complejos significa tener el poder de imponer, en ese momento, una saturación alternativa de acontecimientos, gracias a la gran complejidad del tiemponauta.
Arrow of Complexity = Flecha de Complejidad
Package of Time = Paquete de tiempo
Less complex event = Acontecimiento menos complejo
More complex = más complejo
En la determinación de la realidad, los acontecimientos más complejos tienden a prevalecer sobre los menos complejos.
De hecho, los acontecimientos pueden ser saturados en diversos niveles de complejidad. Podemos imaginarlos como “burbujas pulsantes” dilatándose y contrayéndose, siguiendo un cierto ritmo. Se instalan en el momento en el cual son saturadas (usadas): el “tamaño” en el cual se establecerán depende del nivel de complejidad del Ser saturado. La re-saturación debe ocurrir entrando en el acontecimiento identificado en contra del tiempo. Es necesario avanzar al mismo ritmo de ese específico paquete de tiempo.
Por esta razón, el tiemponauta debe ser (o volverse) compatible con ese ritmo.
Menos complejidad Más complejidad
El tiempo es como una gran sinfonía ejecutada por la majestuosa orquesta de la vida, la cual toca con precisión, siguiendo un ritmo específico.
El tiemponauta representa un nuevo instrumento nuevo de ensamble, entrando perfectamente a tiempo en la armonía, pero es capaz de tocar más fuerte (es más complejo): puede dirigir, poquito a poco, toda la orquesta hacia variaciones, o puede, incluso, imponer un tema o ritmo diferente.
A menudo, los tiemponautas son seleccionados en función a su principal compatibilidad con épocas históricas específicas (también según sus vidas pasadas), para encontrar la mejor solución con un mínimo uso de energía.
Otra observación respecto a los viajes al futuro: si partimos del presente y sabemos que el futuro no está determinado 4, ¿Cuál futuro es el que alcanzaremos?
4 El futuro es definido solo en sus posibles y probables manifestaciones, por lo que es solamente una dirección virtual.
Presente Absoluto
En teoría sería posible alcanzar un futuro probable saltando en el reciente pasado (para tener una mayor perspectiva y “tomar una carrera”) y luego hacia el futuro más probable (este es un corto mundo eco, el cual no es paralelo, sino que es proyectado hacia adelante). Las acciones llevadas hacia el futuro hacen el camino hacia “ese” futuro más grueso, como si hubiésemos lanzado semillas de acontecimientos o reservado un camino preferencial.
Esta operación podría hacer un eventual cambio de camino más difícil, ya que la atracción hacia “aquel” futuro es más fuerte. Por lo tanto, para evitar problemas en la gestión de convertirse en realidad es siempre mejor hacer una perspectiva “pasiva” del futuro (adivinación), porque no afecta en ninguna dirección.
Realmente, la única posibilidad de viajar hacia el futuro está relacionada con el uso de las semillas temporales y sus ramificaciones, puesto que se desarrollan en todas las direcciones posibles, incluso en nuestro futuro relativo.
Recuerde que no estamos en un absoluto presente, sino en un plano que está separado de un plano original potencial (separación de planos).
Relative Present = Presente relativo
Absolute Present = Presente absoluto
Viaje a través de una reencarnación programada,
hecho por otras “fuerzas” con el objetivo de interceptar y neutralizar los efectos de la Era de Acuario.
Esta posición particular de nuestro plano de existencia, que se injerta en la original, hace la gestión de acontecimientos (complejidad/masa) más flexibles de lo que es posible hacer cerca del presente absoluto, cuando los acontecimientos son completamente dirigidos hacia su saturación cronológica y linear.
De hecho, desde una posición que está lejos del presente que pudiéramos conocer, dentro de un rango limitado, el mapa del contexto temporal general y las sedimentaciones de los acontecimientos neutrales (minas temporales).
Para programar un viaje en el tiempo, debemos también considerar el funcionamiento del ecosistema espiritual del lugar del destino. Cuando llegamos a cualquier destino temporal, entramos en relación con las fuerzas Territoriales de ese lugar. Como dijimos previamente, éstas Fuerzas interactúan con la realidad y, de paquete en paquete, las estabiliza y las incluye en su dimensión.
Por lo tanto, cuando entramos a un territorio de acontecimientos que están saturados en cierto nivel de complejidad, nuestra gran complejidad nos da el poder de re-saturarlos desde el punto de vista humano, pero estos mismos acontecimientos han sido también estabilizados por fuerzas divinas a un diferente nivel, en el cual no podemos intervenir. Para hacer eso, debemos armonizar nuestra acción con aquel ecosistema divino, creando un cierto equilibrio compatible: es necesaria una energía sobrehumana.
Hay dos posibles soluciones “tecnológicas” (excluyendo el caso en el cual nuestra Conciencia puede operar.)
La primera solución es estar conectado (iniciado) a un sistema divino armónico, el cual debe ser temporalmente extendido para garantizar la sintonía perfecta de nuestras acciones con todos los ecosistemas temporales.
La otra posibilidad es ser capaz de “usar” la increíble energía de ese concepto tan altamente espiritual que llamamos, como en el mito, “GRIAL”.
El Grial es un concepto muy alto, indefinible e indescriptible en su esencia. En cualquier caso, podemos imaginarlo como un depósito o reservorio inagotable de energías divinas.
El Grial existe físicamente, aunque su forma es mutable. El “tazón” es su arquetipo, pero cambia su forma según las diferentes situaciones, condiciones y tiempo.
La identificación del Grial con el recipiente de la sangre de la pasión del Cristo es un símbolo de la energía que purifica al mundo a través del sacrificio de Cristo (recuerde que también puede tener muchas otras interpretaciones.)
El Grial está vinculado con su imagen, pero es más antiguo que la Cristiandad. Es una parte de un conocimiento específico, celebrado por antiguas civilizaciones, incluso por los antepasados de los egipcios. Es como una unidad de medida, y también es una clave que permite transmutar cualquier energía hacia cualquier otra.
Esta fuerza es necesaria para todas las operaciones teúrgicas. 5
5 El Grial no es una Fuerza evocable, sino que se abre su camino hacia los aspectos más puros del Ser. Este tópico no será profundizado en este contexto.
Como se ha descrito anteriormente, el Grial contiene todas las energías y puede convertir cualquier energía en otra, para permitir cualquier alquimia y transmutación divina posible. De esta manera, puede armonizar la intervención del tiemponauta con la divinidad territorial competente.
Cualquier “máquina del tiempo” es un conjunto muy complejo de laboratorios, templos y equipos que están conectados con toda la estructura energética del planeta y de nuestro sistema solar.
Desde el punto de vista mágico, un “templo” es una instalación tecnológica que es usada para varias funciones, investigaciones y experimentaciones relacionadas con alquimia, misticismo, teurgia, contacto con fuerzas superiores o internas, salud y operaciones relacionadas con la física esotérica, como por ejemplo, transferencias inter-dimensionales y de espacio-tiempo.
Un templo es auténtico solamente si es rigurosamente promovido y es mantenido rigurosamente reservado. A menudo, en la antigüedad e incluso en la historia moderna, muchos templos han sido transformados en los sitios religiosos, museos o en atracciones turísticas altamente rentables.
Un verdadero Templo Iniciático es un crisol de energías divinas cósmicas, telúricas, sincrónicas, físicas y sutiles, humanas, alienígenas y divinas, y de fuerzas inteligentes. Es un campo de distorsión dimensional, una “burbuja” aislada dentro de la cual es posible obtener fenómenos extra-ordinarios, los cuales trascienden cualquier límite del espacio-tiempo y entrar en relación con otros niveles de realidad y con un estado superior de Conciencia. Es un portal espiritual e inter-dimensional.
Un Templo es un “momento inducido de atención divina”, una puerta dimensional que ha sido construida para usar también aquellas peculiaridades geográficas que hacen del Templo un lugar “sagrado” en correspondencia con nudos sincrónicos del planeta., Estos son puntos de convergencia entre diferentes planos y estados del Ser que ponen en relación lo similar con lo similar, y lo alto con lo bajo.
Estas características particulares permiten la sedimentación de acontecimientos neutrales en una verdadera mina temporal desde donde es posible recoger los acontecimientos necesarios para acciones temporales.
El viaje físico en el tiempo consiste en mover la información de la estructura psicofísica del tiemponauta hacia el lugar del destino.
El tiemponauta (un “quántum” de complejidad organizada) no viaja hacia atrás en una pista de tiempo, sino que, a través de sutiles simetrías, se va fuera del tiempo para entrar de nuevo en un punto establecido.
El viaje en el tiempo es siempre un viaje en el espacio, ya que debemos encontrar y lograr el lugar de destino en su posición espacial, en el tiempo seleccionado. La posición exacta puede ser encontrada siguiendo líneas sincrónicas.
No es la masa del cuerpo la que viaja, sino más bien la información de su estructura. Los componentes sutiles y espirituales del tiemponauta no deben ser transferidos: no son temporales y son naturalmente conmensurados a su información física específica.
Durante la transferencia, el cuerpo, que es privado de complejidad y desasociado de la masa, se “derrite”. Su complejidad es convenientemente empacada y aislada, y enviada al lugar de destino para “informar” a los átomos y moléculas, (disponibles allí) para que le den forma de nuevo a todo el cuerpo del tiemponauta. No es la masa la que viaja, sino la complejidad organizada. El cuerpo físico se desintegra en una sustancia similar al agua, mientras que en la destilación temporal programada, el agua es el elemento de donde parte el reensamblaje del tiemponauta.
Cada quark de estructura física del individuo está compuesta de ocho micro-componentes indivisibles llamados “ladrillos básicos de la materia”. Un quark puede ser representado por una especie de Banda de Mobius. Durante proceso de comienzo del viaje en el tiempo, cada quark es descompuesto en una estructura de dos-dimensiones y es duplicada.
Todos los “duplicados” – que están embalados como una compleja y estabilizada información fuera del flujo ordinario del tiempo, – se combinan con los acontecimientos neutrales, que hacen la información original como asimétrica, reorientada y enviada a su destinación final temporal.
Esa información viaja a través de las líneas de simetría de la realidad, corriendo sobre las ramificaciones de la vegetación temporal.
Además de la primera versión de la máquina del tiempo en nuestro laboratorio, había un estanque que recogía el cuerpo del tiemponauta, disuelto en forma de agua (privado de su complejidad natural). Hoy en día, esta operación se realiza mediante la gestión del nivel de humedad de un espacio determinado.
En los casos de viajes por posesión y viajes físicos de corta-distancia, la máquina del tiempo puede gestionar la recepción del tiemponauta en el sitio de destino, así como en el de su retorno. En caso contrario se necesitan estructuras precisas de recepción, en el destino final, o incluso en muchas estaciones intermedias, en caso de que el viaje deba ser dividido en diferentes tramos.
Instalaciones de recepción pueden ser construidas ad hoc, por ejemplo, enviando tiemponautas-posesores solo para construir lo que sea necesario para la recepción física. A menudo, podemos contar con estructuras ya presentes en algunos lugares, o en direcciones cuyas civilizaciones terrestres o extra-terrestres, que ya estén equipadas con una tecnología compatible.
De hecho, descubrimos varias civilizaciones y gente que están diseminados a lo largo del tiempo (incluso a través de una distribución no-cronológica) y que literalmente han colonizado el tiempo – por muchas diversas razones – como si fuera un territorio geográfico.
Tuvimos la oportunidad de reunir muchos mapas temporales y de dibujar nuevos mapas indicando la posición de los puntos de recepción, estaciones intermedias (llamadas “castillos temporales”), vórtices y recodos de tiempo, trampas, sitios misteriosos e inaccesibles, puertas dimensionales y “estrechos” estratégicos. Estamos descubriendo la morfología del Tiempo.
Para realmente comprender la mecánica del viaje en el tiempo, tenemos que considerar la estructura de la materia desde el punto de vista de la física esotérica.
Los registros (hechos por la máquina del tiempo) de los códigos de descomposición y recomposición del tiemponauta comprenden la estructura subatómica del cuerpo y la complejidad relacionada. Esta es la información – mantenida dentro de una geometría láser holográfica – que es enviada. Se sale del plan de existencia y vuelve a entrar en la destinación seleccionada.
Es importante no confundir la dirección temporal con la verdadera dirección del Universo, esta es la distribución de los acontecimientos hacia el resultado de complejidad.
El punto es que no podemos dar por sentado que la evolución del tiempo siga automáticamente la evolución ideal de complejidad. Mientras más complejas sean las formas, más desarrollan una “libre voluntad”, por lo que tienen el poder de causar acciones que no están necesariamente en conformidad con la naturaleza de las leyes: pueden restar valor en vez de acelerar la potencial evolución global (esto no debe confundirse con el mero progreso tecnológico.)
Temporal secuence = Secuencia temporal
Los tiempos “futuros” no corresponden automáticamente a niveles superiores de complejidad; no obstante, desde el interior, solamente proceden hacia una progresiva saturación de acontecimientos, desde las causas hasta los efectos.
Cuando una civilización ser familiariza y utiliza los viajes en el tiempo, puede desarrollar su historia, no solo desplazándose en su propio territorio espacial, sino que también colonizando segmentos descontinuos de tiempo. Para esa gente, es una evolución coherente, pero distribuida en diversos territorios temporales no-cronológicos. Este es un “imperio temporal”. Este concepto se abre a un sentido completamente nuevo de lo que podrían ser la realidad y la historia.
El tiempo es un territorio navegable, y es posible crear una verdadera red de colonias. Por otra parte, gracias al descubrimiento de semillas temporales, es posible extender los viajes hacia diferentes tiempos en diferentes planos de existencia y de mundos.
Un imperio temporal es un reino multidimensional, así como era el Imperio Estelar Humano: desde aquí, desde nuestra Tierra en este preciso momento, podemos recomponer verdaderamente esa antigua grandeza material y espiritual.
Sabemos que el universo continuamente optimiza su balance para obtener el mejor resultado (nivel máximo de complejidad) el la mínimo de inversión de energía.
La Sincronicidad promueve esta dirección y crea procesos de selección de acontecimientos y de planos existentes de la realidad.
Debajo de cierto nivel de resultados, cuando una secuencia espacio-tiempo no respeta el ángulo de complejidad, basado en el cociente entre complejidad-función-información, y acontecimientos-que- forman-masa, se disuelve, se descompone en leyes y es reciclado.
Los segmentos de realidades, e incluso eras históricas completas pueden repentinamente desaparecer sin dejar ninguna pista. Las realidades remanentes son naturalmente conectadas unas con otras por secuencias compensativas de causa-efecto, las cuales hacen coherente la realidad, sin dar la posibilidad a ninguna especie perceptiva a ser consciente acerca de lo que sucedió.
Algunas “islas temporales” sobreviven, en caso de ser caracterizadas por un nivel de complejidad que está cortado sobre el promedio de su flujo, y pasa el examen: estas islas estarán rodeadas por realidades creadas “ad hoc” y capaces de vincularlas a una de las siguientes secuencias posibles.
Esta “exploración o escaneo” y “defragmentación” de mundos ocurre periódicamente y garantiza la optimización de los procesos existenciales, según el resultado holístico de complejidad requerido.
En la jerga de la física esotérica, esta clase de exámenes son llamados “embudos temporales”: imagine un embudo en el cual esas secuencias históricas (civilizaciones y edades) resultan ser incongruentes con el ángulo de la caída sostenible de complejidad. Por el contrario, más allá del embudo, las islas temporales con complejidad aceptable, sobreviven rodeadas por realidades re-organizadas en espacios reasignados.
Nadie puede estar consciente de lo que sucedió; no obstante, alguna incoherencia arqueológica puede atestiguar algo misterioso.
Según nuestros actuales cálculos, es posible que en aproximadamente 600 años, nuestro plano de existencia tendrá que enfrentar un embudo temporal.
Nuestra “isla de complejidad” debe, no solo apoyarse a sí misma en el plano de lo posible, sino que, sobre todo, unirse a una continuidad evolutiva más allá del frente temporal.
Como ya lo dije anteriormente, no toda esa gente que está trabajando para la “salvación del planeta” (eso, en cualquier caso, son conceptos limitados y relativos desde el punto de vista Telémico) están dirigidos por un verdadero plan evolutivo de liberación, sino que más bien quieren garantizar la continuidad de las almas humanas en reproducción, para ventaja de fuerzas opresoras que viven y se desarrollan en detrimento de la evolución terrestre humana.
Un punto de no retorno podría ser el 2012, según muchas antiguas y modernas profecías.
La operación necesaria es llamada “la búsqueda de la isla temporal”.
¿Cómo es posible cambiar la historia a través del viaje en el tiempo?
Desde hace muchos años, hemos estado desarrollando este tópico. Nuestros descubrimientos e interpretación – incluso del mismo fenómeno – han sido cambiados según los nuevos niveles de conocimiento y experiencia.
Los Tiemponautas actúan dentro de una eco-realidad que corre a la par del plano consolidado de existencia . Por ello, sus acciones no consideran el proceso histórico desde donde viene el mismo tiemponauta, y desde donde nosotros eventualmente queremos causar los cambios, puesto que, básicamente, el está actuando en otro plano.
Cuando el tiemponauta regresa al presente, la eco-realidad que él alimentó a través de sus acciones, saturando eventos precisos, tiende a ser naturalmente absorbida por el plano principal, y todos los acontecimientos relacionados están orientados – a través de acontecimientos compensativos automáticos – hacia los resultados históricos originales. Sin embargo, si esa eco-realidad es lo suficientemente compleja y constante o rítmicamente alimentada, entonces puede persistir al lado del plano original, pero sin interferir necesariamente con el.
Esto significa que por lo menos un flujo de acontecimientos pueden volverse lo suficientemente densos, sobrevivir y unirse a nuestro presente, solo si es lo suficientemente complejo y es periódicamente alimentado.
Por ejemplo, esto podría suceder cuando el viajero desencadena un acontecimiento que es apoyado por el comportamiento natural de la gente: el puede apilar algunas piedras en el centro de una encrucijada, lo cual obligará o invitará a los viajeros lejanos a voltear o agregar otras piedras para construir algo…
Ese lugar puede convertirse en punto de permeabilidad entre el mundo-eco y el plano principal; de esta manera, acontecimientos nuevos y diferentes pueden invadir en el plano histórico.
Ahora, no puedo listar en este libro toda la información y las variables que debemos calcular para evaluar si, cómo y cuánto una acción similar podría afectar la historia y las motivaciones éticas que puedan justificar esta clase de acciones: así, mantengamos la explicación solamente en un plano teórico.
Otro método interesante para provocar cambios históricos es la posibilidad de que el tiemponauta no haga ninguna absorción o compensación necesaria. Por ejemplo, haciendo acciones que no pueden interferir con lo que ya ha ocurrido: construir algo y esconderlo o enterrarlo de modo que nadie tendrá nada que ver con este objeto en particular.
Ese acontecimiento puede impregnarse dentro del plano histórico sin realmente modificarlo (por lo menos durante algún tiempo). De hecho, si el tiemponauta, una vez haya regresado al presente, tarde o temprano cava en ese preciso lugar, entonces ese objeto será descubierto: pero, incluso en este caso, su existencia comienza solamente desde el momento del retorno del tiemponauta).
La estrategia más importante respecto a la posibilidad de detectar acontecimientos-clave es actuando en lo que sea posible para afectar una larga serie de otros acontecimientos, y crear una reacción en cadena capaz de ganar peso y caer en el plano original.
Los acontecimientos-claves no son fáciles de detectar, porque tenemos que regresar a una serie de causas, independientemente de nuestros sentidos limitados de causa-efecto e historia. A menudo, un acontecimiento aparentemente
sin significado es el real detonador de hechos históricos muy importantes, que parecieran no tener nada que ver con ello.
Gracias a miles de experimentos, hemos estado creando un mapa de acontecimientos-clave que están relacionados con aquellas áreas del tiempo en las cuales estamos interesados, según nuestro tipo de investigación y trabajo.
A menudo, apoyando o borrando acontecimientos es un “concurso” en contra de otras fuerzas operando en contraposición con la humanidad, con el fin de oponerse a la evolución a cualquier costo.
“Guerras del Tiempo” son luchadas saturando acontecimientos con la complejidad más alta posible, para que no puedan ser restaurados por cualquier otro.
Alimentando o disolviendo secuencias históricas: este es un concepto muy evolucionado de guerra, y es parte de las estrategias de la denominada “guerra mágica”, un conflicto que involucra diferentes planos, mundos, así como inimaginables dimensiones humanas, alienígenas, sutiles y divinas.
Imaginémonos haber creado alguna interferencia en el plano histórico que sea capaz de causar cambios en el pasado y en nuestro presente.
¿Podríamos nosotros estar conscientes de ello?
La respuesta es: “No”.
De hecho, toda la humanidad, incluido el tiemponauta, inmediatamente sustituye – en la memoria consensual de la especie – algo que “siempre ha sido de esa manera”, puesto que lo que “era” nunca fue y es quitado y reemplazado con algo más.
¿Cómo podríamos estar conscientes de algún cambio? Si no podemos recordar o conocer una historia que, cuando es reemplazada, jamás ocurrió. Entonces, ¿qué punto de referencia podemos tener para estar conscientes de que algo cambió? Básicamente, no es siquiera un cambio, sino algo que existe a lo largo de todo.
Encontramos la solución a este problema mediante la construcción de arcas especiales de memoria, también llamadas “cámaras de compensación temporal”.
Las Arcas de la memoria son ambientes especiales (complejos laboratorios aislados del tiempo) en los cuales “respaldamos” la secuencia historica relacionada con un plano temporal preciso, tal como está fijado en la memoria humana: es una imagen del tiempo “presente”.
Estas arcas están fuera del tiempo, y no son afectadas por las interferencias causadas por el viaje en el tiempo, y nos permiten medir el desfase entre la realidad previa y lo que es la realidad una vez que regresa el tiemponauta.
Es importante destacar que los cambios ocurren solamente cuando el tiemponauta regresa, y no durante las acciones que éste está haciendo en el pasado.
Las ramificaciones temporales son las “vías del ferrocarril” en las cuales los viajeros se desplazan en el tiempo, para unirse y actuar en diferentes ubicaciones.
A través de las mismas ramificaciones que usa el tiemponauta, los efectos que produce se reflejan a sí mismos directamente en el presente absoluto, sin interferir con la secuencia intermedia de acontecimientos.
Todas las paradojas no son nada más que una limitada interpretación subjetiva, pero relacionada, con esas acciones que son capaces de poner en discusión los mundos-eco, re-definir cual de ellos debe ser considerado como un plano principal en comparación con todos los otros posibles, y enviar solo al “presente” los efectos de este proceso.
Debemos tener en mente que las causas y efectos son distribuidos en diferentes planos de existencia.
Las ramificaciones temporales son conductores de acontecimientos, que pueden ser transferidos a diferentes destinos sin tocar las secuencias intermedias del plano histórico secuencial.
El objetivo de los viajes en el tiempo es – consolidar el tejido temporal y proteger nuestra realidad evolutiva.
La coherencia temporal restaurada crearía también importantes efectos dentro de nosotros: por ejemplo, la posibilidad de acceder a memorias relacionadas con otras vidas, las cuales, de otro modo, serían completamente excluidas de nuestra posible conciencia.
Esta es una facultad relacionada con nuestro sentido interno de la memoria, que nos hace sensibles a nuestras simultánea dilatación a lo largo del tiempo, a través de aquellas raíces que llamamos “encarnaciones”: algunas de ellas son cruzadas por medio de la percepción de los sentidos (vidas pasadas, actuales y paralelas), otras se preparan para ser activadas según lo que nuestra esencia profunda y trascendente necesita, en términos de significados y experiencias, para evolucionar y completar la conciencia del universo.